Galletas de chips de chocolate

Les confieso que compartir esta receta con ustedes es mi mayor demostración de generosidad para con mis seguidores.   Esta receta es tomada de las bolsas de empaque de semi-sweet chocolate chip de la marca Nestlé Toll House, pero le hice unos ajustes ya que con el clima y la humedad de nuestra ciudad en Cartagena, las galletas de la receta original no salían tan ricas y perfectas.  Con los ajustes hechos, luego de muchas pruebas, tenemos, para mi gusto, la mejor galleta de chocolate chip hecha en casa.  Y lo digo porque todo el que ha comido esta galleta queda encantado, más bien, fascinado.  En un tiempo las estuve vendiendo, pero ya no lo hago, solo las regalo o hago en ocasiones especiales. Hay por supuesto locales comerciales que recientemente conozco, como Braun en Barranquilla, que en mi concepto hacen las mejores galletas de Colombia, con sus distintos sabores y rellenos.

La textura de esta galleta es sin igual, suaves por dentro y duritas por fuera, son una verdadera delicia al paladar. Hechas con 100% mantequilla, tienen una desventaja en nuestro clima cálido y es que no son duraderas, esta receta está hecha para comerse las galletas EL MISMO DÍA. No recomiendo reservarlas para después.   Si crees que son muchas galletas para un día, te recomiendo hacer la mitad de la receta, así la puedes consumir en menos tiempo.   Otro tip es que dejes refrigerada la masa que no te vas a consumir y solo saca la cantidad que te vas a consumir, así puedes usar la masa restante luego de unos días. La masa la puedes también congelar hasta el momento de su cocción, la recomendación con esta opción es que uses el horno a 350F o 180C y hornees por unos minutos más a lo que indica la receta original ya que como están congeladas tardan un poco más en asarse.

Usa chips de chocolate de buena calidad, en Pricesmart están entre otros los de marca Kirkland o Members Choice o si viajas a Estados Unidos tráete unas bolsitas de Nestlé Toll House, Guittard,  Ghiraldelli, o Hershey’s.  En Mercado Libre también las puedes conseguir.  Asegúrate que sean semi-sweet, es decir semi dulce.  Es chocolate con cacao al 60%. 

Otro tip importante es no dejar las galletas enfriándose en la misma asadera donde las horneas porque se te pueden sobre cocinar y secar, y el sabor y textura ya no es la misma.

Sigue al pie de la letra la receta y obtendrás una riquísima galleta.

Ingredientes

1  y 1/2 cubo mantequilla bien fría con sal ( si tienes sin sal agrega 1/4 de cucharadita más de sal a la receta)

3/4 taza azucar morena

3/4 taza azucar regular

2 huevos enteros al clima

1 cucharadita esencia de vainilla

2  y 1/2 tazas de harina

1 cucharadita bicarbonato de soda

1/2 cucharadita de sal

12 onzas (2 tazas)  de chips de chocolate semi sweet de buena calidad 

Preparación 

1. Precalentar el horno a 375F o 200C.

2. Disponer en el mesón todos los ingredientes.

3. Batir mantequilla fría con azúcares, que quede bien mezclado.

4. Añadir uno a uno los huevos, y luego la esencia de vainilla.

5. Dejar batir por medio minuto.

6. Mezclar harina, sal y bicarbonato.

7. Introducir la mezcla de harina, por cucharadas a la mezcla anterior.

8. Finalizar introduciendo los chips de chocolate, dejar batir 5 segundos, hasta que se mezclen con la masa.

9. Colocar la mezcla en la nevera por 20 a 30 minutos.

10. Sacar la mezcla de la nevera y colocar con una cuchara pequeña montoncitos de masa del tamaño de una bola de Ping Pong, trata de que te queden todas del mismo tamaño, separándolas entre sí para dejarlas crecer en el horno y evitar que se te peguen.

11. Hornear en el centro del horno por 10 a 12 minutos hasta que la galleta la veas ligeramente dorada por fuera.

12. Sacarlas del horno y dejar reposar en la asadera por 1 minuto.

13. Desmontar las galletas de la asadera y colocar en una rejilla o en un plato, separándolas entre sí, es decir no colocar una encima de la otra. 

14. Servir calienticas o dejar reposar y servir al momento de su uso.  

NOTA: reservar en un lugar que no entre aire o brisa, preferiblemente meterlas en un recipiente con tapa una vez se hayan enfriado.

Pavlova de frutos rojos

Desde hace ya varios años se puso de moda este delicioso postre a base de merengue, crema batida y frutas, al cual se le llama pavlova, denominado así en honor a Anna Pávlova, una bailarina de ballet rusa de finales del siglo XIX.  En este caso hemos utilizado fresas y moras para hacer la mermelada y dejamos unas frutas frescas adicionalmente para decorar por encima.   Un delicioso y delicado postre, que combina muy bien con cualquiera de tus comidas. Es fresco y no tan dulce, especialmente si usas frutos rojos.  En reemplazo de la crema algunos les gusta usar helado de vainilla, enriqueciendo su sabor y frescura.  

Su presentación es hermosa y apoteósica, pareciera más difícil de lo que es.   Muy poco la brindan en los restaurantes, así que si te gusta, realízala en casa, para un almuerzo o cena especial con tus familiares o amigos, quedarán fascinados y deleitados con su rico sabor!

Ingredientes Merengue (10 personas)

6 claras de huevo a temperatura ambiente

1 y 3/4 de taza de azúcar regular pulverizada (colocar azúcar en licuadora o procesador y pulverizar)

1 cucharadita de fécula de maíz

1 cucharadita esencia de vainilla

1 cucharadita de vinagre blanco

Ingredientes para la crema batida

400 grms crema de leche bien fría 

1/3 taza azúcar glas o pulverizada

1 cucharadita esencia de vainilla

Ingredientes mermelada

750 grms de frutos rojos combinados: mora, fresa (también pueden ser arándanos, cerezas, agraz) reservar unas frutillas para decorar.

3/4 taza azúcar regular

1/2 de taza de agua

Jugo de 1 limón pequeño

Preparación 

Iniciar con la elaboración de la mermelada ya que es la que lleva más tiempo y hay que dejar reposar para que se enfríe.  

1. En una olla colocar los ingredientes de la mermelada, poner a fuego medio, revolver hasta que el azúcar se disuelva y dejar hervir durante 30 minutos. Bajar el fuego y esperar hasta que veas la consistencia de una mermelada (cuando revuelves se le ve el fondo a la olla). Ajustar el azúcar en caso que esté muy ácido cuidando que no te quede muy dulce.  Dejar reposar hasta que se le quite el calor y luego meter en la nevera.

2. Precalentar el horno a 150C o 300F 

3. Hacer el merengue.  Colocar las claras de huevo (asegúrate que NO queden rastros de yema) en una batidora usando el batidor de varilla para huevos.  Batir levemente subiendo poco a poco la velocidad hasta que alcance la máxima velocidad, para formar picos suaves, introducir el azúcar poco a poco junto con la fécula de maíz.  Dejar batir durante 10 a 12 minutos hasta que tome la consistencia de merengue; es decir que si pones boca abajo la base de la batidora el merengue no se riega o se mueve. Bajarle la velocidad a la batidora y añadir el vinagre y esencia de vainilla, mezclar un minuto.  

4.  Tomar una asadera para hornear y colocarle papel mantequilla.  Hacer el redondel de la pavlova formando una especie de piscina redonda como lo puedes ver en la foto. Esto con el fin de poder tener espacio en la mitad para colocar la crema batida y la mermelada.

5. Hornear por una hora o una hora y media hasta que el merengue se ponga duro, y cuando veas que se raja un poco a los lados.  Sacar del horno y conservar en un lugar a temperatura ambiente, que no le pegue brisa porque puede aguarse el merengue.

6.   Mientras la pavlova se enfría a temperatura ambiente, usar de nuevo la batidora, meter la base, la rejilla para batir y la crema de leche en el congelador por 20 minutos para que esté bien fria.  Sacar del congelador y batir la crema añadiendo el azúcar glas y la vainilla.  Batir primero lentamente, subiendo la velocidad poco a poco hasta que tenga consistencia cremosa,  evitar sobre batir porque obtendrás una mantequilla y no una crema.  Utilizar enseguida si estás lista para servir o conservar la crema en la nevera hasta hacer el montaje.

Montaje de la pavlova

Tomar una bandeja donde servir la pavlova, trasladar el merengue grande cuidando que no se rompa, rellenar con la crema batida (o helado de vainilla), colocar encima la mermelada esparciéndola, decorar con las frutas por encima. Servir enseguida o refrigerar mientras se sirve.  Mantener en la nevera en caso de no consumirla en su totalidad. Si has usado helado es mejor consumirlo todo de una vez porque es difícil luego preservarlo.

Galletas de dátiles con nueces

Una combinación perfecta la de los dátiles con las nueces, así como una verdadera riqueza del oriente medio al alcance de tu mesa.   Si eres amante de los dátiles como yo, estas galletas son perfectas para ti, especialmente si las sirves con helado de vainilla o de pistacho, este último realza los sabores de los tres ingredientes, el dátil, la nuez y el pistacho.    Suavecitas y delicadas, estas galletas se dejan consumir hasta dos días después de elaboradas, por su humedad.  Es una receta sencilla sin muchos pasos o elaboración, importante los minutos de cocción que no sea mayor a 11 - 13 minutos, al igual que tener el horno precalentado antes de hornearlas.  Yo dejé reposando la masa en la nevera hasta el momento de servirlas, así la masa se compacta un poco más y las puedes hornear 15 minutos antes de servirlas para conservar su tibieza. 

Ideales para la hora del té, o luego de una comida abundante, se pueden comer solas con un maridaje como un vino espumoso, o simplemente una taza de té o café.  Pruébalas y me cuentas si te gustaron.

Ingredientes (18 galletas)

1 taza y 1/2 de harina multipropósito

1 cucharadita bicarbonato

1/4 cucharadita de canela

100 gramos de mantequilla (no margarina) fría 

1 taza de dátiles trozados

1 taza de nueces trozadas

1/3 taza azúcar regular

1/3 taza azúcar morena

1 cucharadita de vainilla

1 huevo

Preparación 

1. En un recipiente de batidora mezclar la mantequilla con ambas azúcares, el huevo y la vainilla.  Batir hasta que esté cremoso.

2. Añadir harina, bicarbonato, y canela. Mezclar bien.

3. Incorporar los dátiles trozados y las nueces. Dejar que se revuelvan con la masa.

4. Trasladar la masa a la nevera y dejar enfriar por lo menos 15 minutos (yo la dejé durante 1 hora)

5. Mientras, encender el horno a 350F o 180C, 20 minutos antes de hornearlas.

6. Sacar la mezcla de la nevera y con una cuchara  realizar unos montoncitos del tamaño de una bola de golf, y colocarlos en una bandeja para hornear galletas, dejando espacio entre una y otra para que crezcan. Te alcanza para 18 porciones.

7. Hornear por 11 a 13 minutos, que queden ligeramente doradas por debajo y suaves por encima.

8. Sacar del horno, esperar uno o dos minutos, desmontar y servir calientitas. 

Sorprende y disfruta! 

Espaguetis al pomodoro con trozos de Mozzarella de Bufala

Ésta presentación de pasta la vi en Pinterest y me recordó de inmediato a la cocina italiana que mi madre aprendió en Florencia hace varios años atrás.  Entrada en años, en una de sus visitas a mi hermana a esa ciudad italiana, mi mamá tenía aún toda la energía y vitalidad, y se inscribió en un curso de cocina italiana que estaban ofreciendo en Florencia la escuela de Le Cordón Bleu.  Ella sin saber casi nada de italiano, se atrevió a realizar el curso.  Lo que le importaba a ella era aprender, a pesar de que las recetas eran en italiano, entendía el significado de la mayoría de los ingredientes, luego cuando los chef del curso demostraban la preparación ella las escribía en español al dorso de la receta impresa que le entregaban. Fue así como pudimos tener acceso a las recetas que le fueron enseñadas en tan prestigiosa escuela.  Pasta a la vongole, lasaña de ragú, espaguetis a la marinera, farfalles con salmón, eran algunas de las recetas que aprendió.  

La mejor salsa de tomate que he probado ha sido esta que les voy a compartir y que hacía parte del recetario del curso; con una rica adición y es la de colocarle tomates Cherry a la salsa, y servir la pasta junto con un trozo de queso de Mozzarella de Búfala. El secreto de la salsa es su lenta cocción para que todos los jugos del tomate se integren para conformar casi un puré.  No te desesperes, entre más duración en la cocción obtendrás mejor sabor.

Ingredientes (6 personas)

800 gramos de tomate triturado (passata)* o 2 latas de trozos de tomate 

4 cucharadas de aceite de oliva

2 cucharadas de mantequilla

1 cebolla blanca finamente picada

3 dientes de ajo grandes majados

1 cucharadita de azúcar 

12 hojas de albahaca fresca

Sal y pimienta o gusto

1/2 vaso de agua

300 gramos de tomaticos cherry

1 libra de espaguetis

3 bolas de Mozzarella de Búfala enteras medianas

Preparación 

1. En una olla de fondo grueso colocar en la estufa a fuego medio la mantequilla con dos cucharadas de aceite de oliva.  Dejar calentar para luego añadir la cebolla y el ajo.

2. Dejar que la cebolla se torne transparente y añadir el tomate triturado, las hojas de albahaca, sal, pimienta y el 1/2 vaso de agua.

3. Esperar a que hierva la salsa por unos 5 minutos y probarle la sal y pimienta, ajustar si es necesario, añadir la cucharadita de azúcar y bajar el fuego, lo más bajo posible.

4. Mientras, colocar en una asadera los tomaticos Cherry cortados en mitades, salpimentar y colocar por encima dos cucharadas de aceite de oliva.

5. Encender el horno a 350F o 180C y asar los tomaticos hasta que estén ligeramente dorados (unos 20 minutos aproximadamente). Reservar.

6. Dejar la salsa a fuego bajo por una hora y media y luego añadir los tomaticos asados.

7. Colocar una olla con agua en la estufa con suficiente agua para calentar la pasta, colocarle de dos a tres cucharaditas de sal.

8. Dejar hervir el agua y cuando esté suficientemente caliente y haciendo burbujas añadir la pasta. Seguir las recomendaciones de la caja o bolsa de los minutos de cocción.

9. Escurrir la pasta una vez esté al dente y en la misma olla colocar toda la pasta y añadirle toda la salsa. 

10. Servir inmediatamente  en cada plato, con medio pedazo de Mozzarella de Búfala salpimentada. 

Acompañar con un buen trozo de pan. 

Ecco! Ya tienes tu delicioso plato…disfrútalo. 

* si no consigues el tomate triturado, tritúralo tú mismo en un procesador o licuadora hasta que quede hecho puré.

Torta de maiz

 

Suave y esponjosa esta torta de maíz, sin pretensiones ni complicaciones, es una deliciosa receta del recetario de mí mamá de muchos años atrás. Sabe a puro maíz y contiene muy poca azúcar y harina o harina de maiz, a diferencia de muchas recetas costeñas de torta de maíz que usan no solo azúcar, también leche condensada.  Esta receta la puedes achicar o agrandar según el número de comensales que tengas. Es un muy buen acompañante de carnes, como la carne en posta, o lomito fino entero encebollado, o unos filete mignon, entre otros. Te invito a que la pruebes, es muy fácil de hacer.

Ingredientes (16 porciones)

2 tazas de maíz cocido desgranado ( puedes usar el de lata)

4 huevos

2 tazas de queso costeño rallado

4 cucharadas d3 mantequilla derretida

4 cucharadas de harina

1/3 taza vino blanco o ron blanco

1/2 taza de leche

1 cucharadita de sal

1/4 cucharadita de pimienta molida

Preparación 

1. Encender el horno a 350F o 180C

2. Engrasar un molde cuadrado de lata o vidrio (23 a 25 cms de ancho)

3. En un recipiente batir lo huevos bien, añadir el resto de los ingredientes, mezclar.

4. Vaciar la mezcla en el molde, meter al horno precalentado y dejar que cuaje y dore, entre 20 a 25 minutos.

5. Sacar del horno y servir caliente.

Fatteh

 

La comida libanesa sigue siendo una de las preferidas de la gente en todas partes del mundo. Recientemente estuvimos en un viaje por Inglaterra y en Londres encontramos un pequeño restaurante Libanés  cerca a Trafalgar Square, uno de los sitios emblemáticos en la ciudad de Londres.  Por cierto nos pareció una ciudad muy cosmopolita,  grandiosa y hermosa. La mezcla entre lo antiguo y moderno hacen de Londres una ciudad maravillosa la cual tiene cientos de lugares que conocer. Estuvimos seis días y  no fueron suficientes  para hacer todos los planes y conocer tantas cosas interesantes que tiene la ciudad. Definitivamente un lugar para regresar! La comida es este sitio libanés muy rica y le hace honores a las tradiciones culinarias de nuestros antepasados.

Uno de los platos que vi y que quise probar es este plato que no es común en nuestra cocina familiar. Una combination de sabores que hacen memorable y repetible este platillo novedoso para mi y mis compañeros comensales.

Se llama Fatteh y tiene dos versiones,  uno vegetariano y otro con pollo. Muy fácil de preparar y es una delicia para combinar con otros platillos, especialmente con arroz de fideos. 

Ingredientes (8 personas)

4 tazas de pollo cocinado desmenuzado (trozos cortados en cuadros)

2 tazas o 600 grms de yogurt griego sin sabor

2 cucharadas de crema de tahini

1 lata de garbanzos escurridos

1/3 taza de piñones o almendra en mitades peladas

2 galletas arabes

4 dientes de ajo grandes

2 cucharadas de mantequilla

Sal y pimienta

2 cucharadas de perejil picado

Preparación 

1. Dorar los piñones o almendras con la mantequilla y reservar.

2. Cortar las galletas arabes en trozos pequeños y dorar en el horno o en la sartén en el fogón con un poco de aceite de oliva. Reservar.

3. En una sartén a fuego bajo sofreír el ajo machacado y añadir el yogurt junto con la crema de tahini, revolver bien para que se incorpore. Cuidar de que el yogurt no hierva, por eso se recomienda ponerlo a fuego bajo. Salpimentar para que coja gusto.

4. En un recipiente para servir colocar el pollo y encima los garbanzos. Al momento de servir calentar en el microondas luego colocarle encima la mezcla de yogurt, los trozos de pan arabe tostado, los piñones y finalizamos con el perejil.

Servimos caliente y acompañamos con arroz de fideos.

Barras de Dátiles con Almendras

Para quienes no conocen o han probado el Dátil, esta forma de prepararlo en versión tipo brownies es absolutamente deliciosa y sutil.  Los dátiles son una fruta que crece en una palma que es muy popular en el mundo árabe.  Los mayores productores son Iran e Irak, y en las Américas, existe un importante cultivo de dátiles en California.  Estos proporcionan una gran cantidad de nutrientes especialmente potasio. Tienen también un gran contenido en azúcar, por eso hay que consumirlo por sus propiedades benéficas para el organismo, pero con moderación. 

Los dátiles se pueden consumir como fruto fresco o en una variedad de usos como mermeladas, tortas, helados, acompañando las tablas de quesos madurados, entre otros.   Tradicionalmente, los musulmanes rompen el ayuno del Ramadán con un puñado de dátiles. Según la tradición Musulmana el dátil es un fruto paradisiaco, milagroso por sus virtudes nutricionales y digestivas.  Según algunos médicos y nutricionistas el dátil ayuda a reducir el colesterol malo en tu cuerpo. 

Su sabor es inigualable, y existe una variedad significativa de este fruto.  A nuestro país llegan comúnmente de California y la presentación es con pepa o sin pepa, como las ciruelas pasas.  Te recomiendo pruebes esta deliciosa receta, que es fácil de hacer y puedes degustar el sabor de esta rica fruta en una exquisita versión.

Para el relleno

1 y 3/4 tazas de datiles trozados sin semilla

3/4 taza de jugo de naranja

1/4 taza azúcar regular

3/4 taza almendras peladas y en laminas

Pasta 

1 taza mas 2 cucharadas de harina 

1 y 1/4 taza de avena instantanea

1/2 taza de azúcar morena

1/4 cdita de sal

1 y 1/2 cubo de mantequilla a temperatura ambiente

Preparación

1. Precalentar el horno a 350F
2. Engrasar una refractaria cuadrada. Enharinar
3. Para hacer el relleno llevar al fuego los dátiles, el jugo de naranja y azúcar a que hierva a termino medio. Reducir el fuego y cocinar por 3 minutos revolviendo constantemente hasta que quede una pasta. Baje del fuego y añada las almendras. Revolver.
4. Para hacer la pasta colocar la harina, mezclar la avena, azúcar morena y sal. Añadir la mantequilla en trozos y mezclar bien. La pasta debe estar grumosa.
5. Colocar la mitad de la pasta abajo en la refractaria hasta formar una capa.. Añadir la mezcla de dátiles encima de la pasta. Espolvorear por encima el resto de la mezcla de avena, presionar con un tenedor. 
6. Hornear por 30 minutos. Sacar del horno y dejar reposar. Cortarlos en cuadros y servir.  

Galletas de Bocadillo

Mmmmmm, las galletas se están asando y huele a guayaba, un olor dulce y agradable que junto con la mantequilla, hacen de esta galleta una exquisitez.  Polvorositas y delicadas, el dulce de bocadillo, el cual se prepara con guayaba y panela, resalta de manera sutil.  La guayaba es una fruta que se da en los países subtropicales, siendo Colombia el mayor productor del mundo, con un alto índice de consumo interno, por ello poco se exporta. Además de preparar el dulce de bocadillo, la guayaba se consume entera, en jalea y jugos.  Alta en vitamina C, contiene cuatro veces más de esta vitamina que una naranja, por lo que es muy conveniente consumirla desde niños, ya que ayuda a tener más energía y elasticidad en la piel. Es común consumir el bocadillo como postre junto con un pedazo de queso blanco criollo o campesino; últimamente lo vemos servido en tablas de quesos, aportando su rico sabor para una deliciosa combinación. 

Estas galletas te encantarán,  no solo por su sabor también por su fácil preparación. Excelentes para acompañarlas en una mesa de té o con un rico café. No dudes en hacerlas!

Ingredientes (24 galletas) 

1 taza de bocadillo picado en trozos pequeños

125 grms de mantequilla fría (no sustituir por margarina) 

1/2 taza aceite vegetal

1/2 taza azúcar

2 y 1/2 taza de harina

1 pizca de sal

1 cucharadita de vainilla

Preparación

1. Encender el horno a 350F o 180C.

2. Colocar la mantequilla y el aceite en una batidora, cuando esté bien mezclado añadir azúcar y vainilla. Luego añadir harina y la pizca de sal, batir hasta obtener una masa cremosa. 

3. Apagar la batidora e introducir el bocadillo en trocitos, mezclándolo bien a la masa con una cuchara de palo o una paleta de silicona.

4. Hacer 24 bolitas, cuidando que el bocadillo quede por dentro y luego aplastarlas un poco con la mano, colocándolas en la asadera para hacer galletas. 

5. Hornear durante 18 a 20 minutos.

6. Dejar enfriar y servir tibias.

Te aseguro no te resistirás y más de una comerás!

Granola

 

Una alternativa saludable para toda la familia, bien sea para el desayuno o como snack entre las comidas. 

Es muy fácil de preparar, esta hecha con productos naturales, sin conservantes ni preservativos.   Esta granola tiene además pocos ingredientes, ya que si le adicionas más cosas como sucede con la mayoría de las granolas comerciales donde le añaden coco, mani, o frutos secos, frutas deshidratadas, etc, ya deja de ser una opción saludable para tu régimen alimenticio porque  le estas sumando calorías extras. 

Los principales ingredientes en esta receta son la avena y las almendras; en el caso de la avena es rica  en vitaminas B5,B6 y E, minerales como hierro, selenio, manganeso y cobre, y ayuda a reducir el colesterol si la consumes con frecuencia.  La almendra es un antioxidante por su alto contenido de vitamina E; son una excelente opción para los diabéticos y para quienes tienen sobrepeso y quieren reducir de talla. Las almendras también contienen magnesio el cual contribuye a la función normal de los nervios y los músculos; contribuye a su vez a la reducción del cansancio o fatiga.

Lo recomendable para que esta deliciosa granola no te haga subir de peso, es consumiendo unas 3 a 4 cucharadas únicamente al día, y preferiblemente en las mañanas. Esta receta es irresistible por lo que debes tener cuidado con las cantidades a consumir.  Hazla con productos naturales u orgánicos, que sean gluten free, y tendrás una deliciosa y nutritiva granola.

Ingredientes

4 tazas de avena en hojuelas sin gluten

1 taza de almendras laminadas sin gluten

1/2 taza de azúcar morena

60 gramos de mantequilla

1/3 taza de miel de abejas 

1 clara de huevo

1/2 cucharadita de canela

1/4 cucharadita de sal

Preparación 

1. Encender y precalentar el horno a 300F o 150C.

2. En un recipiente grande mezclar avena, almendras, azúcar morena, sal y canela.

3. Derretir la mantequilla a fuego bajo para que no esté muy caliente al mezclarla con los demás ingredientes.

4. Añadir miel de abejas, clara de huevo y mantequilla derretida y mezclar bien con una cuchara.

5. Tomar una bandeja para hornear y colocarle por encima papel parafinado, o de aluminio,  o una esterilla de silicona.  Esparcir la mezcla por toda la bandeja de manera uniforme.

6. Hornear por 30 minutos, hasta que estén ligeramente doradas las almendras.

7. Sacar del horno y dejar enfriar en la bandeja.

8. Colocar en un tarro de vidrio o plastico, herméticos, y guardar en un lugar fresco.

Coq au Vin Blanc

Pollo al vino blanco. Una receta especial para quienes disfrutan de la cocina sin prisa. El secreto de esta receta es dejar marinar el pollo desde la noche anterior, bien sea que vayas a cocinarlo para el almuerzo o para la cena.  Ese tiempo de marinado hace que el pollo se suavice y adquiera un sabor especial. Por lo que debes prepararte desde el dia antes con el vino y el mirepoix, una combinación de zanahoria, cebolla blanca, apio y puerro, el cual se usa en muchas recetas de estofados y guisos. Ademas del bouquet garni, que se le coloca al marinado. 

Esta receta proviene de un libro frances del Cordon Bleu que atesoro de muchos años atrás, cuando apenas daba mis primeros pasos en la cocina. Existen muchas recetas del clasico pollo al vino francés pero en su gran mayoria las encuentras elaboradas con vino tinto, pocas veces con vino blanco, eso es lo que hace que esta receta sea especial. Trata de conseguir un vino frances como el Riesling, un Pinot Gris o Pinot Blanc, vale toda la pena ya que vas a usar el vino completo en la marinada.

Disfruta haciendo esta receta en compañía de amigos o la familia,  el resultado es delicioso y delicado al paladar. Puedes acompañarla con un pure de papas, de yuca, o con un simple arroz blanco, justo para atrapar la salsa y disfrutar su sabor. Esta receta es para cuatro personas, si tienes mas comensales duplícala o triplícla según la cantidad de personas. Un calculo que puedes hacer es de dos presas por persona, y si hay niños una presa por niño.

Ingredientes (4 personas)

4 muslos de pollo con piel

4 contra muslos de pollo con piel

4 cucharadas de aceite vegetal

2 cucharadas de harina

1 taza de caldo de pollo

1 taza de crema de leche

Sal y pimienta al gusto

Para el marinado

1 botella de vino blanco preferiblemente francés

1 taza de mirepoix de verduras

2 dientes de ajo machacados

1 buquet garni (ver foto)

12 granos de pimienta 

Para la guarnición

1 taza de champiñones pequeñitos o cortados en mitades

75 grms de mantequilla

20 cebollitas rojas pequeñitas enteras y peladas

Jugo de 1/2 limón

Una cucharadita de Azúcar

Preparación 

1. Enjuagar bien el pollo con limón, frotandolo por todos lados, quitar el posible exceso de grasa si lo hay.
2. Combinar los ingredientes del marinado y agregar el pollo. Dejar marinar de un dia para otro, preferiblemente durante 24 horas.
3. Escurrir el pollo, guardando el marinado, secarlo con toallas de papel.
4. En una caserola u olla grande y honda  (lo suficiente para cocinar el pollo), preferiblemente de fondo grueso, freír el pollo con el aceite vegetal, dejar dorar por todos lados. Freír por tandas hasta que este todo listo. Esparcir por encima del pollo la harina.
5. Colar el marinado, guardar el liquido y las verduras, apartes. 
6. En la misma olla que se fritó el pollo, freir las verduras hasta que estas se tornen transparentes. Agregar el pollo, luego el vino blanco y dejar hervir unos 5 minutos, agregar todo el caldo del marinado y la taza de caldo de pollo. Agregar el bouquet garni, dejar hervir y luego tapar para dejar cocinar durante 1 hora a fuego lento. 
7. Mientras se cocina el pollo, preparar la guarnición. Con dos  cucharadas de mantequilla sofreír los champiñones en una sartén y rociar el jugo del limón.  En otra sartén, con el resto de la mantequilla sofreir las cebollitas, colocar azúcar y agua para cubrirlas. Dejar dorar y acaramelar.
8. Cuando el pollo esté listo, sacar de la olla y colar la salsa. Devolver a la olla la salsa colada y añadir la crema de leche, revolver bien y dejar hervir. Devolver el pollo a la olla junto con las cebollitas y los champiñones. Salpimentar al gusto. Terminar de calentar y servir acompañado de un puré o arroz blanco.

Bouquet Garni: atado en una hoja de puerro 2 hojas de Laurel, 2 ramitas de Tomillo, 2 ramitas de Romero

Mirepoix: cebolla blanca, zanahoria, puerro y apio